Gallada de Viki Ospina (Barranquilla, 1948) es el nombre con el cual se reconoce a uno de los íconos de la reportería gráfica en Colombia, al condensar la trágica historia política del país y de la integración de la fotografía en el lenguaje artístico nacional. Captada en la intensidad del centro de Bogotá de finales de los años setenta, esta fotografía de un grupo de gamines, radicalmente ampliada, se inscribe en la definición de una práctica contemporánea del arte en Colombia, donde la ciudad, la cotidianidad y sus convulsiones son interpretadas mediante la imagen fotosensible. Cine y fotografía se imponen en ese contexto como modelos estéticos o técnicos de un nuevo leguaje artístico, en una época de reconfiguración urbana, social y política del país.
La imagen, tomada en los alrededores de la Iglesia de las Nieves, puede vincularse a otras tres fotografías de esta colección (AP6477, AP6478, AP6479) que extienden el imaginario de la escena. De los cuatro niños plasmados en principio en el icónico instantáneo, cinco finalmente forman parte del momento. Cada imagen permite entrever la dinámica en la cual se desarrolló la escena. No se trata ahí propiamente de un instante repentino, pero más de un encuentro fortuito. Cada imagen de la serie alarga el tiempo de la toma, y extiende la relación de la fotógrafa con su sujeto. Si bien la imagen resulta ser el producto de un diálogo más que de una captura, la actitud desafiante de los niños, ligeramente agresiva y benévola a la vez, recuerda todo el impacto de la intrusión de la fotografía en su cotidianidad: sigilosa, tímida y violenta a la vez.